MARTHA HILDA

MARTHA HILDA

Estaba Martha Hilda pensando

A un lado de su escritorio

Cuando llegó su secretario

Hasta su puerta gritando.

 

Señora, señora alcaldesa

Le grita con mucha vehemencia

La busca entre la raza

La parca para una audiencia

 

Martha la mira asombrada

Y solo atina a decirle

Parca, estoy acostumbrada

A reñir con gente tan prole.

 

La parca la mira sonriendo,

Y entonces levanta su falda,

Y Martha la dice gritando

Déjame a Carlitos Nava.

 

¿Para que quieres un inepto?

Por él te critican tanto

De seguridad no tiene un concepto

Y mejor te propongo un trato.

 

Contigo no hago concesiones

Contesta la alcalde valiente,

Ya basta de vacilones,

Y deja a ese incompetente.

 

Me voy muy triste te dejo,

Le dice la parca a Martha,

Si quieres a este conejo,

Emprendo muy triste la marcha.